¿Sabías que lo más loco que escuchaste de Ozzy Osbourne apenas araña la superficie?
Una estrella del heavy metal que fue despedido de su propia banda, mordió animales vivos en escenario, estranguló a su esposa creyendo que era un demonio, y se volvió icono mundial por los escándalos más salvajes de la música. Aunque suena imposible… todo eso pasó, y no en una película, sino en la vida real de Ozzy Osbourne, el llamado “Padre del Heavy Metal”. ¿Quieres saber cómo cada uno de estos capítulos estremeció al mundo? Sigue leyendo, porque esta es la historia completa detrás del mito y las recordamos a pocos días del fallecimiento del cantante.
1. ¿Por qué lo corrieron de Black Sabbath?
En 1979, Ozzy fue expulsado de Black Sabbath, la banda por la que todo el mundo lo conocía. La razón principal: su adicción al alcohol y a las drogas lo había vuelto impuntual, conflictivo y poco profesional. Aunque Sabbath era la banda más ruda y peligrosa de su época, su comportamiento sobrepasaba cualquier límite aceptado. Fue Sharon Osbourne—hija del manager de Black Sabbath—quien, al ver el deterioro de Ozzy, decidió separarlo del grupo.
2. El murciélago en el escenario: la mordida más infame de la historia
En enero de 1982, durante la gira Diary of a Madman en Des Moines (Iowa), un fan arrojó un murciélago en el escenario. Ozzy creyó que era de juguete y le mordió la cabeza. Cuando sintió un temblor en su boca y la sangre corriendo, se dio cuenta de que era real. Terminó siendo enviado al hospital para recibir tratamiento antirrábico por varios días. Este episodio no solo marcó su imagen como el “Príncipe de la Oscuridad”, sino que se volvió una leyenda del rock… y tuvo que vacunarse contra la rabia por lo ocurrido.
Ese evento generó titulares en todo el mundo, pero Ozzy siempre insistió que fue un error: no sabía que era un animal vivo. El impacto fue tan grande que su carrera cambió para siempre.
3. La noche que confundió a Sharon con un demonio
Una noche fatídica en agosto de 1989, tras asistir al Moscow Music Peace Festival, Ozzy, en un estado de ebriedad extrema y bajo la influencia de múltiples sustancias, intentó estrangular a su esposa Sharon creyendo que era un demonio. Él mismo había perdido todo control de su mente. Sharon presionó un botón de pánico y acudieron ayuda para rescatarla. Él entró en rehabilitación seis meses después y ese fue un punto de quiebre importante para su matrimonio y su carrera. Aunque parezca increíble, la relación sobrevivió y ellos reconstruyeron su vida juntos.
4. Reality show familiar convertido en fenómeno involuntario
A principios de los 2000, Ozzy y su familia protagonizaron el reality “The Osbournes”, un proyecto que pretendía mostrar la vida privada de un rockstar. En teoría, era para humillar… pero la ironía fue que el público se rió de la familia entera, y el programa fue un éxito de audiencia. En vez de exponerlos, terminó transformando a Ozzy en una estrella de la cultura pop y lo presentó como un papá torpe, familia disfuncional y humor imprevisible. Un triunfo cómico que Ozzy nunca planeó, pero que redefinió su identidad más allá del escenario.
5. El reto de las hormigas de Mötley Crüe
Una noche de fiesta, un integrante de Mötley Crüe retó a Ozzy a inhalar hormigas por la nariz usando una pajilla. La apuesta era absurda, y nadie hasta hoy sabe qué ganaron o perdieron… excepto que Ozzy aceptó y ganó. Fue tan rápido que nunca llegó a cobrar nada. Nadie está seguro del origen del reto, pero se convirtió instantáneamente en mito urbano del rock. Aunque no hay cita clara de fuentes, la historia se ha repetido en infinidad de anécdotas por quienes vivieron aquella época.
6. Despistes sobre el escenario: perdió el micrófono y olvidó la letra
En plena actuación, Ozzy solía olvidar dónde había dejado el micrófono... ¡mientras lo sostenía en la mano! También interrumpía canciones porque se le olvidaba la letra o no sabía qué estaba haciendo. Estas fallas no nacieron con el diagnóstico de Parkinson (que recibió en 2020), sino décadas antes. Paradójicamente, esos momentos fueron celebrados por fans como parte de su encanto y su espontaneidad sobre el escenario.
7. ¿Todo esto afectó su legado?
Sin duda, todas estas acciones conformaron la leyenda de Ozzy. Pero más allá del espectáculo, su voz, su presencia y su talento musical definieron el heavy metal. Desde su álbum Blizzard of Ozz hasta su retorno ocasional con Black Sabbath, su influencia fue total. Aunque murió el 22 de julio de 2025, semanas después de su concierto de despedida en Birmingham, dejó un legado imborrable.
8. ¿Qué podemos aprender de estas historias?
Que la imagen pública rara vez muestra el caos interno. Ozzy construyó su personalidad sobre caos, exceso y espectáculo.
Que incluso las figuras más turbulentas pueden reinventarse. Tras sus crisis, encontró estabilidad junto a Sharon.
Que el fanatismo rockero no solo celebra la música, también lo absurdo y lo inesperado.
Conclusión
Ozzy Osbourne fue despedido por ícono del heavy metal, mordió un murciélago pensando que era un juguete, confundió a su esposa con un demonio, inhaló hormigas por una apuesta, olvidaba sus letras en pleno show… y aún así se ganó el corazón de millones. Lo cierto es que cada locura construyó una parte de su mito: un hombre imperfecto, apasionado y extraordinariamente real.